Por Mitsubishi Motors |
Si estás buscando informarte antes de comprar una camioneta es usual que hayas escuchado palabras como caballos de fuerza o torque cuando hablamos de la potencia del motor.
El término caballos de fuerza suena lo suficientemente simple; una unidad de medida que indica la potencia, o la cantidad de trabajo realizado. En términos prácticos, los caballos de fuerza representan la energía equivalente que se necesita para:
Los caballos de fuerza a menudo nos dan una idea de lo rápido que puede ir un auto, pero ¿qué hay acerca del torque? ¿Te impresionaría un motor con relativamente menos caballos de fuerza, pero con mayor torque?
Si aún no conoces este importante componente, te invitamos a conocer todo lo que debes saber del torque.
Tabla de Contenidos:
Se refiere a la fuerza de rotación o giro generada por el cigüeñal del motor; también se denomina fuerza o potencia de tracción. El torque se crea cuando un motor de combustión convencional gira alrededor de un eje. Ten en cuenta que no tiene por qué dar lugar a un movimiento, pero cuando lo hace, se denomina “trabajo”. Cuanto más alto es el torque, mayor es la capacidad del motor para realizar el trabajo.
Es fácil creer que los caballos de fuerza son el componente estrella, en virtud de que se mencionan primero cuando se habla de la potencia del motor. Sin embargo, todo comienza con el torque.
Imagina que abres un frasco de mantequilla de maní o mayonesa, luchando con la tapa sellada, intentas con todas tus fuerzas abrirla incluso cuando tu mano empieza a doler, mientras que la tapa se niega a moverse.
La fuerza que ejerces sobre la tapa, independientemente de si consigues abrirla o no, es el torque. Cuando finalmente aflojas la tapa, el siguiente paso es girarla rápidamente para poder abrir el frasco. Ahí es cuando se aplican los caballos de fuerza.
En otras palabras, los caballos de fuerza son una consecuencia del torque. Antes de beneficiarse de todos los caballos de fuerza que posee un motor, se necesita el torque para que el motor funcione.
Al tratarse de una fuerza de giro capaz de generar rotación, el torque puede ser medido. La fórmula para determinar el torque es la siguiente:
Torque = F x L
F representa la fuerza y L es la longitud de la palanca
Mientras tanto, el torque del motor a partir de los caballos de fuerza (HP) se calcula multiplicando los caballos de fuerza por una cifra constante (5.252) y dividiendo el producto por la velocidad del motor (expresada en revoluciones por minuto o RPM). Determinar el torque en un motor de 300 HP que gira a 2.500 RPM, por ejemplo, sería así:
Torque = (300 hp x 5.252) / 2.500 RPM
Torque = 630 Nm
En una transmisión automática, un convertidor de torque, componente que transfiere la potencia del motor a la caja de cambios, es un acoplamiento de fluido que conecta el motor de combustión con una carga dada en rotación.
Los tamaños de los convertidores se basan típicamente en el diámetro exterior aproximado de la carcasa de la turbina, con las medidas redondeadas a la dimensión base.
Por ejemplo, un convertidor con un núcleo de 245 mm se traduce en 9,6 pulgadas de diámetro, pero comúnmente se denomina 9 pulgadas.
Mientras que los caballos de fuerza enfatizan la velocidad, el torque es la capacidad del vehículo para acelerar el motor a bajas velocidades. Es lo que mueve el auto desde una parada, le permite ir por caminos empinados y tirar cargas pesadas.
El torque es más accesible en marchas bajas, por lo que es necesario reducir la marcha al adelantar, independientemente de la cantidad de caballos de fuerza que tenga el motor.
Supongamos que un auto de carreras y un volquete tienen la misma potencia. ¿Podemos concluir que ambos tendrán el mismo rendimiento?
Es poco probable. En el auto de carreras, el engranaje utiliza el torque para la velocidad. El auto es relativamente pequeño y más ligero, por lo que no necesita tanto trabajo para mantenerlo en el suelo, dejando muchos caballos de fuerza de sobra.
El camión volquete, por otro lado, utiliza la salida de manera diferente. Como tiene más masa, no puede alcanzar las mismas velocidades que el auto de carreras. Sin embargo, el engranaje del camión está orientado a tirar y empujar el peso. Con el motor y el engranaje adecuados, un camión puede generar suficiente torque para tirar de cargas que son más del doble de su propio peso.
La próxima vez que veas las especificaciones de un auto, presta más atención al torque del motor. Los números que encuentres pueden impresionarte más de lo que pueden hacerlo los caballos de fuerza.
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