7 cosas que pueden agotar la batería de tu auto

Por Mitsubishi Motors | 28 Enero 2022

Una batería agotada puede ser molesta, pero también puede evitarse. Para ayudar a prevenir una batería agotada, primero hay que saber qué la causa. Así que por el momento deja a un lado los cables de arranque y echa un vistazo a estas siete cosas que podrían explicar por qué la batería de tu camioneta sigue muriendo.

1. Has dejado los faros encendidos

Si la batería sigue agotándose, lo primero que debes comprobar son las luces. Muchas camionetas nuevas tienen faros diseñados para apagarse después de un cierto tiempo. Pero si tu auto no tiene esta función, los faros pueden permanecer encendidos hasta que los apagues o hasta que la batería de tu vehículo se agote por completo.

2. Algo está causando un consumo innecesario

Incluso cuando el auto está apagado, la batería suministra energía a cosas como el reloj, la radio y el sistema de alarma. Estas cosas no deberían tener un impacto importante en tu batería. Lo que puede agotarla cuando está apagada son cosas como las luces interiores, las luces de las puertas o incluso los relés en mal estado.

Mientras el motor está en marcha, el alternador recarga la batería, por lo que normalmente no hay que preocuparse de que esta se agote mientras se pone la radio a todo volumen para ir al trabajo. Pero cuando el motor está apagado, el alternador no puede recargar la batería, lo que permite que pequeños percances eléctricos la agoten por completo.

La tensión de la batería causada por estos problemas eléctricos se conoce como consumo parasitario.

Puedes ayudar a evitar los consumos parásitos apagando todas las luces y asegurándote de que el maletero, la guantera y las puertas están completamente cerradas y trabadas antes de salir del auto.

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3. Las conexiones de la batería están sueltas o corroídas

Los terminales positivo y negativos conectados a la batería pueden aflojarse con el tiempo. Estos terminales también pueden corroerse. Si se aflojan o se corroen, podrías tener problemas para arrancar el vehículo porque la batería no puede transmitir correctamente su energía.

Incluso, podría detenerse mientras conduces o dañar los componentes electrónicos del vehículo. Puedes ayudar a prevenir los problemas relacionados con la corrosión limpiando regularmente los terminales de la batería. Si no estás seguro de cómo limpiar los terminales acude a un concesionario autorizado para que un especialista se encargue del mantenimiento.

4. Hace mucho calor o frío en el exterior

El clima invernal y los días calurosos de verano pueden causar problemas a la batería de tu vehículo. Las baterías más nuevas suelen tener más resistencia a las temperaturas extremas de la temporada. Pero si tu batería es más antigua, el frío o el calor intensos pueden debilitar su rendimiento o incluso hacer que se agote por completo.

Si notas que tu batería tiene dificultades para resistir las temperaturas extremas, un especialista calificado te puede ayudar a diagnosticar y solucionar el problema.

5. La batería no se carga mientras se conduce

Tu auto depende de la batería cuando enciendes el motor. Pero cuando el vehículo está en marcha, la batería depende del alternador para mantenerse cargada. Si el alternador no funciona correctamente, no puede cargar la batería de forma efectiva, lo que puede dificultar el arranque de tu vehículo, incluso si sólo estabas conduciendo.

Si tu auto no arranca después de conducir, existe la posibilidad de que sea el alternador.

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6. Estás haciendo muchos viajes cortos

El arranque del motor toma una gran cantidad de energía de tu batería, pero como se mencionó anteriormente, el alternador la recarga mientras el motor está en funcionamiento.

Sin embargo, si realizas frecuentemente trayectos cortos, es posible que el alternador no tenga tiempo suficiente para recargarla adecuadamente entre las paradas, especialmente si tienes una batería antigua. A la larga, los viajes cortos frecuentes pueden acortar la vida útil de este importante componente.

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7. Tu batería tiene varios años de antigüedad

Nada dura para siempre. En algunos casos, la batería de tu vehículo puede durar hasta cinco años, pero eso depende de dónde vivas y de cómo conduzcas. Las temperaturas extremas, los viajes cortos frecuentes y el uso cotidiano en general podrían acortar su vida a dos o tres años. Si esta se agota rápidamente, incluso después de arrancarla, puede que sea el momento de cambiarla.

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